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El consumo de drogas ha llegado a ser, en los tiempos modernos, un problema serio que tiene repercusiones en el campo de la salud individual, familiar y social, generando una gran preocupación debido al auge que ha tenido, principalmente, entre los adolescentes y los adultos jóvenes.

Es este un fenómeno que tiene causas de tipo sicológico, social, económico, político y que, además, constituye una violación a los derechos humanos de los niños, niñas y adolescentes, tal como está consagrado en la convención sobre los derechos del niño de las Naciones Unidas.

Lo anterior tiene como consecuencia que se busque una salida en la droga, dejando como secuela el abandono del estudio, muertes prematuras, accidentes, violencia, robos, etc…

“No podemos desconocer que éste es un problema sensible que es necesario abordar y de manera conjunta con todos los sectores involucrados”, señaló la gobernadora del Huasco, Alexandra Núñez, quien viene liderando una mesa de trabajo orientada al tema de la seguridad pública en la provincia, y en la que se han tratado estos temas, en donde se ha puesto especial énfasis en desarrollar planes, políticas y programas que permitan llevar a cabo un combate efectivo a este ilícito y para eso como gobierno tenemos que tomar en cuenta las iniciativas que instituciones como la Subsecretaría de Prevención del Delito del Ministerio del Interior, SENDA, Carabineros de Chile o PDI propongan en esta materia, señaló la autoridad.

La Policía de Investigaciones manifiesta que existe una realidad preocupante frente al tema y que tiene como protagonistas a niños y jóvenes, específicamente al interior de los establecimientos educacionales. El consumo y porte de drogas es una realidad que no se puede desconocer, y en consecuencia se debe actuar.

A raíz de lo anterior las policías dan cuenta que frente a un mismo hecho las soluciones y respuestas son disímiles. Por ejemplo, si un alumno de 3ero medio es sorprendido portando 3 papelillos de marihuana, el director del establecimiento tal vez tomará la decisión de llamar a los apoderados. Frente al mismo caso pero en otro establecimiento, el director talvez puede que llame a carabineros, en otro se llamara a PDI, en otro no se llamara a nadie y se optara por suspender al alumno y así sucesivamente.

Para dar respuesta uniforme a esta multiplicidad de soluciones frente al mismo flagelo del consumo y porte al interior de los establecimientos educacionales, la PDI ha elaborado un protocolo de actuación frente al porte tráfico y consumo de drogas, documento que ha de permitir hacer frente a una realidad que está afectando a los jóvenes de la región y del país, en general, instrumento (protocolo) que en lo medular establece ciertos criterios que orientan al encargado responsable del establecimiento, los directores, a dar la solución correcta de acuerdo a la legalidad vigente.

La comunidad educativa es fundamental en materia de prevención, son los llamados a detectar estas irregularidades a temprana edad de nuestros niños, es un deber ético y moral trabajar este problema a nivel educativo, es por ello que al entregar esta herramienta buscamos unificar criterios, trabajando coordinadamente entre todos, destacó la gobernadora.

En la ocasión estuvieron presentes, junto a la gobernadora, la seremi de educación, Pilar Soto, el jefe de la tercera región policial de Atacama, prefecto inspector Juan Rodríguez, los directores regionales del SENDA, Martha Palma, y Carlos Olivares de la Coordinación Regional de Seguridad Pública, representantes de la PDI, Carabineros y los directores de establecimientos educacionales de la provincia.