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A más de un año de haber tomado la decisión de cerrar el complejo de faenamiento de cerdos más grande del país -ubicado en Freirina, Huasco, en la Región de Atacama-, Agrosuper inició la venta de parte de los activos fijos de esta planta, en un precio mínimo de $3.220 millones (US$ 5,6 millones), lo que no incluye los terrenos donde se encuentran las instalaciones.

La información se desprende de la página web de Colliers, empresa internacional que se dedica a transacciones e intermediaciones de bienes inmuebles y muebles, que es la que está a cargo del proceso de enajenación de esta unidad clave del mayor complejo industrial de faena de cerdos que se haya construido en el país.

La inversión total hasta que el holding liderado por Gonzalo Vial tomó la decisión de cerrar el complejo en diciembre de 2012 ascendía a unos US$ 500 millones. Este monto incluía el terreno, los animales, las máquinas, los gastos en remuneraciones y su desarrollo ingenieril.

El proceso de venta directa incluye solo bienes muebles cuyo traslado es menos complejo y no otras estructuras de mayor tamaño como son los enormes galpones del complejo industrial.

El proceso, según la ficha publicada por la intermediaria, señala que está a disposición de los interesados la planta faenadora de cerdos Freirina de marca SFK / Nijhuis Water Technoly en el monto señalado. A su vez, destaca que el equipamiento se compone de una planta de proceso de matadero y corte, y de una planta de tratamiento de efluentes para el mismo matadero. Todo el equipamiento se encuentra dentro de los contenedores de transporte desde las fábricas respectivas, acota Colliers y agrega que dicha unidad se encuentra sin uso.

La línea de faena tiene una capacidad para unos 500 cerdos por hora y es ampliable a mil cerdos por hora.

En tanto, el túnel de enfriamiento tiene una capacidad para 4.600 cerdos, y la línea de corte, línea de desposte y líneas de empaque tienen una capacidad de unos 350 cerdos por hora.

La decisión del cierre de la planta de Agrosuper en el norte se tomó a principios de diciembre de 2012 en vista de los bloqueos y ataques que afectaron a la empresa en esas instalaciones, tras episodios de malos olores que generaron problemas y protestas por parte de la comunidad.

Además, la planta se paralizó por exigencias contenidas en una nueva Resolución de Calificación Ambiental (RCA) que reducían a la mitad la capacidad de producción del complejo, haciéndolo económicamente inviable. Esto, de acuerdo con las razones que expuso la empresa en un hecho esencial enviado a la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS).

Fuente: Emol.cl