Más de 13 mil controles y fiscalizaciones realizo carabineros entre 17 y 23 de septiembre
Con la finalidad de evitar la ocurrencia de delitos de mayor connotación social e incrementar la sensación de seguridad en la ciudadanía durante los días de celebración de Fiestas Patrias y que para muchos se prolongó por más de cinco días, personal de Carabineros de la Prefectura Atacama incrementó sus controles y fiscalizaciones diarias.
Dentro de este contexto, entre el lunes 17 y domingo 23 de septiembre, se realizaron más de 13 mil controles y fiscalizaciones aleatorias, las cuales se abocaron a fiscalizaciones en locales comerciales (766), a locales de alcoholes (559). En estas jornadas preventivas el personal de Carabineros también revisó que dicho local cumpliera con la legislación vigente, entre ellas que no se expendiera bebidas alcohólicas a menores de 18 años.
En el caso de la fiscalización a locales de alcoholes, la labor está directamente orientada a mejorar la calidad de vida de los vecinos que residen en las cercanías de estos locales. Del mismo modo, se llevaron a efecto mil 630 controles de identidad y 9 mil 223 controles vehiculares, cursando un total de 842 infracciones al tránsito.
“Estas fiscalizaciones están dentro de nuestro plan de trabajo diario, pero para estas fechas de celebración se reforzaron con más personal y en aquellos sectores donde se instalaron fondas y ramadas, así como también las rutas de la región”, señaló el general Jorge Tobar Alfaro.
Respecto de los hechos delictivos ocurridos durante estos días, el general Tobar dijo que a nivel regional se detuvo un total de 100 personas, 73 de ellos por cometer delitos de mayor connotación social y 27 por mantener orden de aprehensión vigente.
“Como institución tenemos la responsabilidad de fiscalizar e infraccionar a quienes incumplan la ley. Éste es nuestro trabajo y en eso estamos”. Sentenció el general Jorge Tobar, destacando el trabajo permanente del personal que por estos días se reforzó y extendió a cada rincón de celebración, sin descuidar o dejar de lado plazas y lugares de recreación que se encuentran cerca de los locales de alcoholes, de las fondas y ramadas, que producto del consumo excesivo de alcohol en sus recurrentes, se transforman en potenciales centros delictivos.