La nueva generación minera formada en ENAMI

A lo largo del 2019, la estatal ha abierto las puertas de sus faenas a más de 200 jóvenes quienes accedieron a distintos programas de capacitación y prácticas. Se trata de una nueva generación que ha demostrado interés por sortear los presentes desafíos de la industria.

Tienen diferentes edades y sus metas son distintas, sin embargo, su interés por desempeñarse en el rubro minero los une como una nueva generación llamada a buscar nuevas formas de sortear los desafíos de la industria, y que con motivo del mes de la minería hoy están más latentes que nunca.

Se trata de 216 jóvenes que a lo largo del 2019 han desplegado sus capacidades y competencias en distintos programas impulsados por la Empresa Nacional de Minería (ENAMI), abriéndoles las puertas de sus plantas y fundición, para que puedan conseguir la experiencia necesaria para acreditar su formación técnica o profesional.  

“Mi familia es minera y trabaja en la mediana minería. A mí me gustaría seguir esa tradición, y quizás trabajar en ENAMI”, aseguró Francisco González. El atacameño de 23 años es parte del inédito programa de Aprendices que ENAMI inició este año. La iniciativa busca aportar con la formación de 56 jóvenes en oficios de operadores, mecánicos e instrumentistas, para planta y fundición.

Tarea de formación que responde a la proyección de demanda de la próxima década para la minería, la que se ha estimado en cerca de 30 mil personas en distintos oficios, puestos técnicos o profesionales. Ante tal desafío, ENAMI apostó por potenciar su línea de educación en el marco de su trabajo de relaciones comunitarias, y ha dicho presente en nueve establecimientos educacionales de Antofagasta y Copiapó por medio de Consejos Asesores Empresariales.

Asimismo, robusteció la matrícula 2019 del programa DUAL a 26 alumnos de Enseñanza Técnico profesional de los Liceos Polivalente El Palomar y el Liceo Tecnológico, ambos de Copiapó, y reforzando la presencia del Liceo Jorge Alessandri Rodríguez de Tierra Amarilla. Actualmente, el grupo se encuentra en pleno proceso de formación en la fundición Hernán Videla Lira (FHVL) y Planta Matta.

El jefe de Relaciones Comunitarias, Rodrigo Mora, explicó que el plan –solo para estudiantes de terceros y cuartos medios de liceos técnicos profesionales- contempla una semana en clases en los establecimientos y otra práctica en la empresa. “Es una especie de apadrinamiento por parte de la empresa, que se trabaja y concreta mediante los Consejos Asesores Empresariales, donde ENAMI se inserta con su oferta”, detalló Mora.

Apadrinamiento que dio la oportunidad a Sandra Quispe, estudiante de explotación minera en el Liceo Polivalente El Palomar, de conocer de la mano de su maestro guía, Alfonso Pérez, los procesos en el área de preparación y mezcla de la FHVL. «Aquí haces lo que en el Liceo te explican. Los trabajadores han sido muy amables y preocupados de enseñarnos, yo sin duda en un futuro me veo estudiando Ingeniería Civil en Mina», sentenció Quispe, quien aseguró que al conocer los procesos productivos sintió mayor motivación.

Motivación que también se traduce en los periodos de práctica que ENAMI pone a disposición de estudiantes año a año. Tarea que la empresa emprendió con el fin de ser una fuente de conocimiento para jóvenes profesionales y memoristas, que buscan encantarse con el rubro. Así, durante 2019 arribaron a la estatal 73 estudiantes en práctica a distintas faenas y 61 memoristas que hicieron su trabajo de tesis con el apoyo de la empresa.

“Como ENAMI estamos muy contentos de apoyar a estos jóvenes que son el futuro de una industria que tiene nuevos desafíos, que necesita de ideas frescas y que mejor que sean estudiantes de nuestras zonas de influencia, como Paipote y Tierra Amarilla, los que nos ayuden a ser mejores productiva y ambientalmente. Estamos orgullosos que esta nueva generación minera haya escogido a ENAMI para comenzar una carrera en la minería”, destacó el vicepresidente ejecutivo de la estatal, Robert Mayne-Nicholls.

El ejecutivo relevó la misión de la empresa de generar una trasferencia de conocimiento entre generaciones, al establecer la relación trabajadores-estudiantes, proceso que busca inspirar a esta nueva generación minera.