CNR identifica zonas más vulnerables de Coquimbo y Atacama para aumentar competencias de agricultores y profesionales del sector agrícola
El programa de transferencia tecnológica para mejorar la eficiencia hídrica frente al cambio climático benefició a regantes y agricultores de las comunas de Vallenar, Freirina, Huasco, La Serena, Coquimbo, Paihuano, Vicuña, Illapel y Los Vilos.
Pese a las dificultades asociadas a la pandemia por COVID-19, la Comisión Nacional de Riego (CNR) destacó el trabajo territorial y a distancia desarrollado en el marco del programa de “Transferencia tecnológica para la adaptación al cambio climático en áreas agrícolas vulnerables de las regiones de Atacama y Coquimbo”.
Tras concluir esta iniciativa, cuyo principal objetivo fue formar capacidades y conocimientos en tecnologías de riego eficientes para enfrentar periodos de sequía frente al cambio climático en el Norte Chico, comenzó a desarrollarse a fines de 2019 en las comunas de Vallenar, Freirina, Huasco, La Serena, Coquimbo, Paihuano, Vicuña, Illapel y Los Vilos. La inversión del programa, ejecutado a través de la consultora Aquasys superó los $170 millones.
Al respecto, el Coordinador Zonal Norte Chico de la CNR, Felipe Ventura, señaló que “como Comisión Nacional de Riego estamos muy contentos por el trabajo realizado por la consultora Aquasys, que, en una primera etapa, nos permitió identificar las zonas más vulnerables del Norte Chico. Se trabajó con 232 regantes que fueron capacitados y tuvieron un fortalecimiento en tecnologías de adaptación al riego”.
“Se realizaron días de campo y una serie de procesos que esperamos que los agricultores puedan poner en práctica en sus campos. En ese sentido, creemos que el fortalecimiento y la transferencia de tecnologías es importante para hacer una mejorar eficiencia hídrica, ya que como CNR creemos que no solamente con obras de riego vamos a lograr una mayor eficiencia en el uso del agua, sino que también con una mejor gestión. Pudimos corroborar que los participantes pudieron aumentar sus conocimientos en sus técnicas de riego en un 64%”, puntualizó Ventura.
De igual manera, añadió Ventura que “en el transcurso de este programa también se capacitó a los extensionistas de los diversos servicios del agro, especialmente de INDAP, ya que ellos son quienes enseñan a los regantes. En ambas regiones se implementaron dos estaciones experimentales que, en el caso de Vallenar, quedó a cargo del INIA, y en Coquimbo, en manos del CEZA de la Universidad de Chile. Lo relevante también es que nos quedamos con estos insumos para continuar trabajando y fortaleciendo las competencias de nuestros usuarios, especialmente frente a esta condición de sequía”.
En tanto, el Seremi de Agricultura de la Región de Atacama, Patricio Araya, indicó que “es de gran importancia este programa, especialmente porque estamos viviendo el cambio climático y la disponibilidad de agua se hace cada vez más escasa en nuestra región, fenómeno que enfrentamos hace varios años. Hemos visto cómo sistemáticamente se han ido secando los ríos, disminuyendo los acuíferos y la disponibilidad del recurso hídrico es cada vez menor. Por ello, es muy relevante el trabajo desarrollado particularmente con las comunidades de aguas más apartadas de la región, de modo que tengan claridad de cuáles son los mecanismos y posibilidades que tienen para poder postular sus proyectos de riego. Para ello, se realizaron parcelas demostrativas, se capacitó a los operadores y consultores de los sistemas de riego, que son fundamentales en esta tarea”.
Entre los resultados de este programa se encuentran el diagnóstico y definición de áreas vulnerables con escasez hídrica y agricultores prioritarios, visitas individuales, unidades demostrativas, curso de riego para agricultores, días de campo, talleres técnicos, curso de riego para agentes de extensión INDAP, y talleres para dirigentes, entre otros.