Esto luego de los trabajos desarrollados en los sectores altos de la ciudad de Copiapó Dirigentes reconocen cambios positivos en el suministro de agua potable

Una fuerte inversión de $1.600 millones fue la que desplegó la empresa sanitaria Nueva Atacama, para dejar atrás una serie de discontinuidades de servicios en los sectores altos de la ciudad de Copiapó, falencias que se arrastraban desde la administración anterior.

Para estos trabajos, se realizaron tres cortes programados durante mayo, los cuales fueron evaluados de buena forma por el jefe de Desarrollo de Proyectos de Nueva Atacama, Francisco Leyton. “La evaluación es super positiva, porque logramos reponer el servicio en estos tres cortes programados de manera anticipada, mucho antes de lo programado, lo cual trae consigo un beneficio a nuestros clientes que lograron la reposición del agua mucho antes de lo proyectado”, dijo.

Leyton recalcó que las nuevas tuberías e infraestructura instalada permitirán una serie de mejoras, como continuidad y calidad de servicio. Además, señaló que dirigentes del sector reconocen que ya se está notando la diferencia.

Dirigentes

Cecilia Campillay, presidenta de la Junta de Vecinos Los Minerales IV Etapa, explicó que “hay una diferencia en el agua, nosotros lo hemos comentado con nuestros vecinos, no tiene ese sabor malo que tenía antes, está más clara, está más rica el agua y uno la puede tomar tranquilamente, varios vecinos se han dado cuenta”, comentó.

La dirigenta también recalcó que hubo claridad en los avisos y se pudo recurrir a los estanques de suministros alternativos que se dispusieron oportunamente para los cortes programados.

Por su parte, Patricia Alquinta, presidenta de la Junta de vecinos María Delfina Hidalgo, junto con señalar la mejora en el servicio, destacó que “si está mejor, está con mayor presión y se nota mucho en el calefont la diferencia de la presión y ha estado funcionando mejor y sin ningún problema”, comentó.

Próximamente la empresa comenzará con otros proyectos de mejoramiento que contempla abordar los puntos donde la infraestructura ya cumplió su vida útil y es necesario hacer una actualización de tecnología, la cual ha permitido mejorar la calidad y continuidad en el servicio.