SEREMI del Medio Ambiente valoró la creación de un fondo especial para Pérdidas y Daños en la COP27.
Por primera vez en la historia, los países reunidos en la cumbre climática mundial acordaron un fondo dedicado a pagar las pérdidas y daños del cambio climático en regiones vulnerables del planeta.
El plenario de la COP27 aprobó en la madrugada del domingo la decisión de financiar las “Pérdidas y Daños” del cambio climático. Luego de dos meses de una mesa liderada por la ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, y su par alemana, Jennifer Morgan, la Presidencia de Egipto anunció que las partes acordaron crear un fondo especial para Pérdidas y Daños, un tema desafiante y que encontraba resistencia en muchos países.
“Después de intensas semanas de trabajo, este es un desenlace que emociona. Se tomó la decisión de crear un fondo especial para abordar Pérdidas y Daños. Esto era una petición histórica de los países en desarrollo y que se haya accedido es también histórico. Es primera vez que se aprueba algo de esta magnitud», comentó desde Egipto la ministra Maisa Rojas.
En esa línea la SEREMI del Medio Ambiente, Natalia Penroz valoró la iniciativa afirmando que la Región de Atacama no está ajena a esos fenómenos puesto que Cambio Climático ha dejado enormes pérdidas y daños, cada vez más frecuentes, asociado a aluviones, sequias prolongadas y olas de calor, así como fenómenos que se manifiestan de forma gradual, tales como el aumento del nivel del mar y la desertificación.
La tarde del sábado, la Coalición para la Ambición en Cambio Climático, integrada por Chile y Alemania, advirtió que mantener el aumento de la temperatura media mundial por debajo de 1,5 °C “será esencial para limitar pérdidas y daños futuros» y llamaba a metas más ambiciosas.
Entre los aspectos de la decisión adoptada destaca:
Se reconoce la necesidad urgente e inmediata de contar con recursos financieros adecuados para ayudar a los países en desarrollo que son particularmente vulnerables a los efectos adversos del cambio climático, como respuesta a las pérdidas y daños económicos y no económicos asociados a estos efectos. Esto incluye rehabilitación, recuperación y reconstrucción.
Establece nuevos acuerdos de financiamiento para ayudar a los países en desarrollo que son particularmente vulnerables a los efectos del cambio climático, en pérdidas y daños. Esto incluye proporcionar y movilizar recursos nuevos y adicionales, incluso fuera de la Convención y del Acuerdo de París.
En el contexto de establecer los nuevos acuerdos de financiamiento a los que se refiere el punto anterior, se decide crear un fondo específico para responder a pérdidas y daños.
Establece un Comité de Transición para la puesta en marcha y la operatividad de la nueva financiación para responder a pérdidas y daños.
Pese a la reticencia inicial de algunos países y tras intensas negociaciones, en el plenario se adoptó la propuesta trabajada en la mesa, aunque con algunos ajustes. Los detalles de cómo será operativo el fondo -por ejemplo, su sistema de gobernanza e identificación de fuentes de financiamiento- deberán acordarse con las recomendaciones del Comité de Transición dentro de un año, en la siguiente cumbre climática COP28 que se realizará en Emiratos Árabes en noviembre de 2023.