Conoce cuáles son las lesiones más frecuentes en el fútbol femenino
Ya sólo faltan horas para que inicie la Copa Mundial Femenina de la FIFA Australia y Nueva Zelanda 2023, instancia que reunirá a las mejores seleccionadas a nivel mundial. Por ello, resulta relevante saber cuáles son las principales lesiones a las que se exponen durante este torneo, que de por sí se diferencian a las competencias masculinas.
La práctica de fútbol femenino está creciendo día a día. En la actualidad el ‘’deporte rey’’, dejó de ser terreno sólo de hombres y por ello la FIFA pretende doblar el número de niñas y mujeres que practican este deporte en el mediano plazo, esperando alcanzar 60 millones de participantes para el año 2026.
Sin embargo, si lo que se espera es tener resultados exitosos y que siga creciendo el interés por el deporte más popular, debemos poner especial atención a las lesiones deportivas que se presentan con mayor frecuencia en la categoría femenina pues se ha demostrado que las concusiones cerebrales (a raíz del impacto de la pelota en la cabeza), los esguinces de tobillo y las lesiones de rodilla son más frecuentes en el género femenino. Entre ellas, la lesión del ligamento cruzado anterior cobra especial importancia, ya que tras diversos estudios se ha observado que su incidencia es 2 a 6 veces mayor en el futbol femenino y especialmente en edades más tempranas. De hecho esta lesión, por su gravedad y el tiempo prolongado de recuperación puede cambiar el curso de una carrera deportiva.
Además, se ha demostrado que hombres y mujeres cubren un terreno similar de desplazamiento durante los partidos, por lo que más allá de la preparación física, existen factores intrínsecos de las deportistas, que en determinada situación son predisponentes a presentar esta lesión.
“En el fútbol ocurren cambios de dirección súbitos, pivote, aceleración y desaceleración brusca, por lo que se ha visto que la anatomía de la rodilla, los factores hormonales, una mayor laxitud articular y factores biomecánicos pueden contribuir en la aparición de una lesión. El apoyo tras un salto con un menor ángulo de flexión de rodilla puede aumentar el valgo (rodilla hacia adentro) y la rotación externa de esta, causando mayor estrés sobre el ligamento. Por otra parte, el uso de calzado deportivo especialmente diseñado para el pie de las mujeres también puede incidir”, detalla la Dra. Zoy Anastasiadis, traumatóloga de Clínica Las Condes.
¿Cómo prevenir este tipo de lesiones?
“Estos factores de riesgo pueden ser en parte modificables. Es por ello que se han diseñado programas de entrenamiento para corregir o mejorar factores neuromusculares, lo que ha demostrado reducir el riesgo de lesión entre un 30 a 50%”, agrega la especialista. Por otra parte, el objetivo de estos programas es realizar ejercicios de balance, coordinación, fuerza y pliometría, que permitan lograr un mejor control de la rodilla, manteniendo en eje el ángulo cadera-rodilla-pie.
La especialista también detalla que este tipo de programas de entrenamientos específicos no sólo se recomiendan para aquellas mujeres que juegan futbol profesional, sino también de categoría amateur.
“Es un hecho que el fútbol femenino es uno de los deportes con mayor velocidad de crecimiento en los últimos años y las mujeres pueden estar más predispuestas a sufrir ciertas lesiones, por lo que, además de mejorar el nivel de acondicionamiento físico y optimizar los programas de entrenamiento para la carga deportiva, se debe educar a los entrenadores y al medio deportivo en la utilización de programas de prevención, cuya eficacia ha sido ampliamente demostrada”, agrega la Dra. Anastasiadis.
El mundial inicia este 20 de julio y terminará el 20 de agosto. En total se consideran 32 países participantes y el desarrollo de 64 partidos. De ahí la importancia de prevenir y estar al tanto de las situaciones que podrían desencadenar una lesión.