Gobernador de Atacama Miguel Vargas denuncia que Dirección de Presupuestos aún no transfiere recursos del 2024 a los Gobierno Regionales
- El retraso en la toma de razón por parte de la Contraloría General de la República en torno al presupuesto aprobado para el año 2024 se ha convertido en la piedra de tope para dar inicio a nuevos proyectos y programas en todos los Gobiernos regionales del país, demorando obras de infraestructura, compra de equipos y programas de fomento para el desarrollo de sectores productivos.
El Gobernador Regional de Atacama, Miguel Vargas Correa, afirmó que aún no se ha podido dar inicio a la ejecución del gasto 2024 del Gobierno Regional Atacama. Lo anterior, según la máxima autoridad de la región se debe a la demora en la toma de razón por parte de la Contraloría General de la República para el proyecto de ley 2024, retraso que hasta la fecha (1 de febrero) ha impedido a la Dirección de Presupuestos (Dipres) transferir los recursos para cubrir la cartera de inversiones de la institución, pese a que fue aprobada por el Consejo Regional en diciembre del año pasado. Una situación que se repite en los 16 Gobiernos regionales de país.
“Esto nos pasa la cuenta en el transcurso del año y después nos critican porque no somos eficientes en el gasto. Es un contrasentido total, entonces necesitamos que exista más velocidad, que las disposiciones normativas se aceleren, que no exista tantas trabas administrativas. Finalmente estos retrasos le restan competitividad al Estado, y nos imposibilita llegar pronto con la solución de los problemas en función de las demandas ciudadanas”, manifestó el Gobernador Vargas.
Tras la tardía respuesta de las reparticiones públicas antes mencionadas, en enero de este año el Gobierno Regional tuvo gasto cero, hecho que dilató una serie de proyectos importantes para la región. Al respecto, la primera autoridad de Atacama detalló que, por ejemplo, iniciativas como el programa “Viva el Verano en Atacama”, que contempla actividades estivales en cada comuna, pudo ejecutarse desde principios de año. Sin embargo, la Contraloría se mantiene sin tomar razón del presupuesto aprobado por Dipres, provocando el retraso de este traspaso de recursos a las municipalidades para actividades culturales y deportivas hasta febrero y marzo.
Asimismo, la primera autoridad detalló que esta acción dificultará “toda la infinidad de ámbitos en los cuales en el Gobierno Regional Atacama interviene”, como lo serían las “obras públicas, fondos concursables para las organizaciones, apoyo a la gestión de municipios, subsidios para los sistemas de agua potable rural y mantención de áreas verdes”. Incluso, esto podría retrasar el traspaso de recursos a los sectores productivos de la región, como el apoyo a pequeños mineros, pequeños agricultores y pescadores artesanales.
Cabe destacar que el Gobierno Regional de Atacama fue uno de los primeros servicios públicos que aprobó su presupuesto de 2024 luego de la ratificación en el Congreso de la Ley de Presupuestos el pasado 30 de noviembre. Además, la Dipres aprobó preliminarmente 86 mil millones de pesos para la institución, monto ocho mil millones menos a los 94 mil millones que proyectó la entidad regional.
De todas formas, la burocracia y las dificultades que aquello genera en la descentralización fue una temática denunciada de manera transversal en el último encuentro de la Asociación de Gobernadores y Gobernadoras de Chile. En particular, se comentó a los representantes del Ministerio de Hacienda la necesidad de acelerar las disposiciones normativas para ocupar los recursos.
Ante aquello, el Gobernador Vargas recordó que “no solo basta con la voluntad del Gobierno Regional y otras reparticiones, sino que esto depende de la Dipres y la Contraloría. Muchas veces se desconoce el rol que juegan en el ejercicio público, y es donde hoy tenemos dificultades objetivas”.
El presupuesto asignado para el 2023 fue ejecutado en un 99,4%, cifra que ha permitido seguir movilizando concursos, transferencias económicas y otras actividades del Gobierno Regional de Atacama a esperas de la aprobación del nuevo erario regional.