DGA del MOP ordena cierre de bocatomas para prevenir crecidas por lluvias invernales

DGA del MOP ordena cierre de bocatomas para prevenir crecidas por lluvias invernales

 Con el fin de anticiparse a posibles crecidas de caudales generadas por las lluvias del invierno, la Dirección General de Aguas (DGA) del Ministerio de Obras Públicas (MOP) ordenó el cierre preventivo de bocatomas en cauces naturales en todo el país, desde la Región de Atacama hasta Magallanes. La medida rige entre el 15 de mayo y el 15 de septiembre y busca prevenir desbordes que puedan afectar a la población, caminos y obras de infraestructura.

En la Región de Atacama, la instrucción fue oficializada a través de la Resolución DGA Exenta N°545, dictada el pasado 9 de mayo, y fue notificada formalmente a las organizaciones de usuarios de aguas, especialmente a las Juntas de Vigilancia de las cuencas de los ríos Copiapó y Huasco, responsables de ejecutar los cierres correspondientes y garantizar el libre escurrimiento de las aguas.

La directora regional (s) de la DGA en Atacama, María Fernanda Avilés, explicó que esta acción responde a la necesidad de mitigar riesgos:

“Esta resolución busca prevenir situaciones de emergencia que puedan poner en riesgo a la población, caminos u obras cercanas a los cauces naturales. No obstante, comprendemos las necesidades agrícolas y de uso doméstico, por lo que se permite el funcionamiento excepcional de canales si cuentan con medidas de resguardo suficientes que garanticen la seguridad de las personas y sus bienes”.

En esos casos, las comunidades de aguas superficiales deberán informar a la DGA los puntos de captación, el estado de la infraestructura y los contactos responsables. La información se puede entregar presencialmente en la oficina regional de la DGA en Copiapó (Rancagua 499, Edificio MOP, primer piso) o de forma virtual en el portal https://recepciondocumental.mop.gob.cl.

Medidas y excepciones a nivel nacional

A nivel nacional, la DGA instruyó que todas las Juntas de Vigilancia, Asociaciones de Canalistas, Comunidades de Aguas y usuarios individuales con obras de captación deben cerrar sus bocatomas y retirar cualquier elemento que pueda obstaculizar el paso natural del agua. Esto incluye también a captaciones rústicas, las que deberán habilitar cauces de descarga para evitar desbordes.

El director general de Aguas, Rodrigo Sanhueza, explicó que esta medida tiene carácter preventivo ante fenómenos hidrológicos extremos:

“Esta instrucción busca proteger vidas y bienes. Hemos establecido excepciones para permitir la recarga de acuíferos y el abastecimiento esencial, siempre que existan condiciones seguras y se mantenga un monitoreo constante de las alertas emitidas por SENAPRED”.

Para solicitar una excepción, las organizaciones deberán acreditar que el canal cuenta con mantenimiento adecuado, dispositivos de control de caudales, personal capacitado y un plan de acción frente a crecidas, además de estar atentas a las alertas oficiales de SENAPRED.

Multas por incumplimiento

El incumplimiento de esta medida puede conllevar sanciones que van desde 51 UTM ($3.501.048) hasta 500 UTM ($34.324.000 aprox.), además de otras posibles acciones civiles o penales.

La DGA reiteró el llamado a cumplir con la normativa y coordinar acciones preventivas, destacando que el cierre de bocatomas es una herramienta clave para enfrentar de forma segura la temporada de lluvias y proteger tanto a la población como a la infraestructura crítica en las zonas cercanas a cauces naturales.