Bodas de Oro: Historias de amor que son reconocidas

Estos matrimonios cumplieron 50 años y el Instituto de Previsión Social les hizo entrega del Bono Bodas de Oro reconociendo su vida juntos.  

 El Bono Bodas de Oro se instaura el año 2011, bajo la Ley 20.506 y otorga una ayuda económica a quienes cumplen los 50 años de matrimonio. Para tramitarlo se debe acreditar esta condición y la solicitud se hace conjuntamente entre los cónyuges, quienes reciben el pago en partes iguales.

Margarita Córdova Cerda y Oscar Guerra Álvarez cumplieron con los 50 años de matrimonio, ellos se conocieron en Copiapó durante un baile, pololearon durante 10 meses y con 17 y 25 años decidieron unir sus vidas en un camino juntos. Tuvieron dos hijos varones y dicen que el secreto para mantenerse unidos es la comprensión, la fidelidad y la confianza. Reconocen que al principio no fue fácil, pero que el amor les ayudó a conocerse y entenderse y seguir la vida juntos, la que ha sido muy tranquila y llena de alegrías para ambos.

Inés Varas Arredondo es oriunda de Freirina y se conoció con Héctor Vega en la plaza de esa comuna, el que la miraba entrar a su trabajo todos los días hasta que ella le habló, de ahí iniciaron una vida juntos, donde tuvieron 4 hijos, tres hombres y una mujer que ya los hacen abuelos de 14 nietos. Aseguran que los 50 años de matrimonio han sido muy lindos y que lograron construir una familia muy unida, de esas que se juntan los fines de semana y se apoyan entre todos.

La directora del IPS Atacama, Dissa Castellani señaló que “es muy gratificante ver a estos matrimonios que cumplen los 50, años y donde como servicio les hacemos entrega de un reconocimiento a través del Bono Bodas de Oro. Conocimos sus historias y lo más gratificante es que ellos han formado familias en base al amor y la confianza”.

Durante el 2018, el monto fijado para el Bono Bodas de Oro es de 313.236 por pareja. Deben presentarse en los Centros de Atención del ChileAtiende, con la cédula de identidad y cumplir con lo básico; no estar separados o divorciados en una causa legal,  tener al día el Registro Social de Hogares y pertenecer al 80% más vulnerable del país. Aquellas personas que están en hogares de larga estadía, que son reconocidos por el Estado, pueden hacer el trámite a través de un apoderado que cuente con un poder notarial y acredite la permanencia de los cónyuges en una residencia.