Joven que participa de talleres en el Hospital Comunitario del Huasco saca 2do lugar en el Campeonato Nacional de Artes Marciales Atacama

El sicólogo Carlos Ríos no esperaba este logro cuando comenzó a realizar talleres de prevención de drogas en el Hospital Comunitario del Huasco. Lleva cerca de dos años trabajando en ése centro de Salud y con los pocos recursos con que cuenta impartió el taller de Jiu -jitsu, un arte marcial milenario de autodefensa, con 2 mil quinientos años de  antigüedad, basado en un sistema de palancas corporales con el objetivo de defenderse de agresores y asaltantes, los cuales antiguamente hacían uso de su superioridad física para atacar. El objetivo de los talleres: los jóvenes vulnerables y la prevención del consumo de drogas a través de actividades saludables, que potencian la autoestima y el autocuidado.

Por eso, Carlos dice estar feliz, después de que uno de los 16 jóvenes que son parte del grupo obtuvo el segundo lugar a nivel nacional en un campeonato de esta disciplina.

 “Cuando uno realiza este tipo de talleres espera que al menos un joven no caiga en el consumo de sustancias tóxicas, pero no esperas este tremendo logro, que además da impulso a otros jóvenes en las mismas circunstancias para que participen”, dice el sicólogo, quien imparte personalmente el taller de Jiu- Jitsu. Y agrega: “A través de una práctica como esta los jóvenes aprenden a canalizar las emociones negativas, separan la rabia, el miedo, y potencian su sutoestima, y el cuidado de sí mismo, el resultado es que ellos no se involucran en el consumos de sustancias tóxicas, porque no las necesitan”, dice.

El director del centro de salud, Ignacio Videla, quien le dio el vamos a la propuesta del psicólogo cuando arribó a Huasco, no esconde su contento con la noticia. “Para nosotros es un tremendo orgullo que este joven tenga este logro. Lo que hicimos fue apoyar este tipo de iniciativas. Es motivante que vengan aires nuevos y que podamos usarlo en beneficio de nuestros usuarios. Con estos talleres estamos poniendo en práctica la prevención,  evitamos el acceso a la droga. Con que un joven no caiga en las drogas yo me siento muy satisfecho”, comenta e invita al resto de la comunidad a participar de esta y otras iniciativas: “Hay una página Web, pero además nos preocupamos de quienes participen tengan la autorización de sus padres o tutores, y además realizamos exámenes a estos jóvenes que quieren contar con una práctica de vida sana”.

El estudiante de 17 años que obtuvo este segundo lugar estaba en riesgo social, con una familia de escasos recursos, y mucho problemas emocionales, comentan. Hoy da cátedra a otros estudiantes y comenta cómo es posible, a pesar de las circunstancias adversas, obtener logros destacados.Pero este no es el primer taller que se realiza al alero del Hospital regional de Copiapó. Antes se había realizado un taller de magia, que también significó obtener una participación destacada.