Cuidarnos para cerrar bien el año: estrés, bienestar y lo que realmente importa, las personas

Cuidarnos para cerrar bien el año: estrés, bienestar y lo que realmente importa, las personas

Termina el año y, con él, aparece una invitación necesaria: encontrarnos, escucharnos y cuidar nuestra salud mental. El cierre de año suele traer una combinación compleja de exigencias, plazos y tensiones emocionales. En ese contexto, hablar de salud mental no es solo oportuno: es necesario. Desde la Universidad de Atacama hemos impulsado acciones y orientaciones que buscan justamente eso: prevenir el malestar y fortalecer el bienestar de nuestra comunidad.

A través de la Unidad de Bienestar del Personal y Relaciones Laborales, dependiente del Departamento de Recursos Humanos de la Universidad de Atacama. Nuestro trabajo se centra en acompañar, orientar y promover el bienestar integral del funcionariado, especialmente en momentos donde el estrés laboral tiende a incrementarse.

En estas semanas se combinan factores que la evidencia identifica como críticos: sobrecarga de tareas, alta exigencia y autoexigencia, escasa desconexión digital, climas laborales tensos y menor apoyo social. A ello se suman las presiones personales propias de diciembre, que aumentan la carga emocional y reducen la capacidad de recuperación psicológica. Reconocer estos elementos es clave para intervenir a tiempo.

Junto a ello, existen factores protectores con respaldo científico: colaboración entre equipos, comunicación clara, organización del trabajo con metas alcanzables, hábitos saludables, descanso adecuado y espacios de contención emocional. Estos elementos reducen significativamente el estrés y fortalecen la resiliencia individual y colectiva.
A nivel institucional, la Universidad de Atacama ha avanzado de manera significativa en la consolidación de un modelo de gestión coherente con sus políticas de Salud Mental, Género y Diversidad, e Inclusión Laboral. En esta línea, desde Recursos Humanos se ha impulsado un Programa de Relaciones Laborales y Bienestar orientado a fortalecer las condiciones psicosociales del trabajo y promover una cultura organizacional centrada en las personas.

Este programa incorpora medidas concretas como horarios flexibles, modalidades de teletrabajo, e interferiados institucionales (26 de diciembre y 2 de enero), entendidas como acciones razonables y progresivas que facilitan la conciliación entre la vida personal, familiar y laboral. Estas iniciativas permiten que las y los funcionarios dispongan de tiempo para su autocuidado y para compartir con sus seres queridos, especialmente en el cierre del año académico y administrativo.

Con ello, la Universidad reafirma su compromiso con el fortalecimiento del salario emocional, reconociendo que el bienestar y la salud mental de la comunidad funcionaria son pilares fundamentales para un desempeño sostenible, un clima laboral saludable y una experiencia laboral alineada con los estándares actuales de calidad de vida en el trabajo.

En estas semanas de alta demanda, les dejo algunas recomendaciones esenciales: poner límites, priorizar, pedir apoyo oportunamente, realizar pausas, reconocer avances y practicar la autocompasión. Las fiestas pueden empujarnos hacia lo urgente, pero su sentido es profundamente humano: conectar, agradecer y estar presentes.
Cerrar bien el año no depende de hacer más, sino de cuidarnos mejor. Cuando volvemos a lo esencial las personas y los vínculos, todo se ordena, encuentra su lugar… y mejora.

Marcelo Aracena Vega
Psicólogo Organizacional

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