Fauna silvestre cuenta con jaulas especiales para su rescate

Un ejemplar de loro tricahue incautado a un particular en la capital regional fue quien estrenó las nuevas jaulas con que cuenta el Servicio Agrícola y Ganadero, SAG, en sus oficinas sectoriales de Copiapó y Vallenar, obras que tienen el propósito de albergar de manera apropiada y segura a la fauna silvestre que transitoriamente recibe la institución producto de decomisos y denuncias de la ciudadanía.

Las instalaciones en ambas zonas están habilitadas para recibir desde mamíferos mayores como guanacos, pasando por zorros y aves de menor tamaño, y en el caso de Copiapó reúnen hasta nueve jaulas de distinto volumen. Los trabajos involucraron además la construcción de pisos lavables, cortinas y techumbres, alcanzando una inversión general cercana a los 6 millones de pesos.

Para la directora regional del SAG, Lorena Roco Zamorano, los recintos permitirán al SAG no tener que derivar fauna hacia centros externos de conservación, tal como se venía haciendo hasta ahora, permitiéndole al Servicio trabajar de forma independiente en la atención de fauna dañada o retenida ilegalmente.

Roco destacó que las dependencias fueron levantadas cumpliendo las exigencias que contempla la normativa sobre bienestar animal, expresadas en la Ley 20.380 de Protección de los Animales y sus reglamentos, que contempla requisitos tales como un adecuado espacio, superficies seguras, disposición de luz natural, adecuada temperatura y circulación de aire, entre otros. Más adelante, indicó la autoridad, se implementarán bebederos, posaderas, casetas para escondite y dormitorios, entre otras mejoras.

El loro tricahue incautado, especie en peligro de extinción y protegida por ley, permanece en observación en las nuevas dependencias y posiblemente será liberado a su medio natural dentro de pocos días. Cabe destacar, que el procedimiento de decomiso fue realizado por la Brigada de Delitos Medio Ambientales de la Policía de Investigaciones en colaboración con el SAG.

La fauna silvestre chilena se caracteriza por estar representada por un número relativamente pequeño de especies que muestran un importante nivel de endemismo, es decir, que son exclusivas del país. Ello implica un alto valor desde el punto de vista genético y de biodiversidad. La caza y captura de fauna silvestre se encuentra regulada por la Ley de Caza y su Reglamento.